La pasión por viajar puede depararte extraños y curiosos compañeros de aventura. Alrededor del mundo existen transportes únicos y no menos particulares en los que vivir una experiencia única para recordar el resto de la vida. Es el caso de los rick shaw, vehículo de tracción humana con dos plazas y dos o tres ruedas que subsiste en los países de Asia y que ha pasado de ser un transporte VIP a un medio muy popular de desplazamiento.
En algunos países hay que salvar un obstáculo acuático para llegar a tu destino. Pero eso no es problema con los water taxi que unen islas o recorren canales o lagos en sitios como Vancouver, Sidney, Chicago, Venecia o Dubai. Si pretendes un viaje mixto agua-tierra puedes recurrir al amfibus, un autobús diseñado y equipado para abandonar la carretera e introducirse en un río o lago. Es popular en la zona de países bajos, contando con capacidad para 50 pasajeros y una velocidad máxima de 100 kms por hora en tierra y 14 km/h en el agua. Otro curioso medio para viajar es el tuk-tuk, triciclo motorizado también originario en Asia, aunque ya vigente en medio mundo y que suele hacer las veces de taxi y vehículo de reparto de mercancías. En Cuba hay una versión llamada Coco Taxi para dos pasajeros. No solo son un reclamo turístico ya que también son usados como medio de transporte por los habitantes locales.
Si quieres emociones fuertes prueba el tranvía colgante de Wuppertal, Alemania, un monorrail en suspensión de 13 kilómetros de largo que cruza la ciudad y permite unas vistas espectaculares para más de 25 millones de usuarios anuales. Un viaje alegre es posible en Haiti con el tap-tap, una pequeña camioneta multicolor de asientos de madera en el que solo hay fijada la primera y la última parada. Para bajar solo tienes que golpear en las paredes, de ahí lo de tap-tap, para que conductor se detenga. Si el viaje es en grupo puedes probar el Beer bike, un multiciclo en el que mientras das un paseo por la ciudad y la conoces puedes ir tomando unas cervezas mientras el conductor se encarga de maniobrar y de frenar. Puedes usarlo en Londres, Berlín o Dublín. Volviendo al medio acuático en Tailandia subsiste la típica y sólida barca de bambú que ha pasado de transporte local a oferta turística.
Mezclando el tren con el autobús, el chiva discurre en América del Sur moviéndose por vías con el aspecto de un transporte terrestre. Su misión es conectar los Andes con la costa, y sigue plenamente operativo. Y acabando sobre raíles, el tren de bambú es una plataforma hecha con este material gracias a un pequeño motor y con un incesante traqueteo que agita los huesos del viajero en Battambang, Camboya.
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